Como bien sabemos, el pasado 14 de marzo el Gobierno decretó el estado de alarma en nuestro país a causa de la alarmante llegada del Covid-19.
Dicho estado de alarma tenía impuesto el cumplimiento de una cuarentena para todos los ciudadanos españoles, en la cual se procedía al cierre inmediato de comercios y servicios que no fueran de primera necesidad.
De esta manera, muchas empresas y trabajadores se veían sin sus salarios y ganancias habituales. Los expertos pronostican la llegada inminente de una crisis financiera de la que, con toda probabilidad, no podremos recuperarnos hasta 2021.
Vuelta al trabajo industria y construcción
A día de hoy, el estado de alarma sigue vigente en todo nuestro país. No obstante, a partir de esta semana muchos comercios y servicios que no se consideran de primera necesidad y en los que no es posible realizar el trabajo de forma telemática, podrán reabrir de nuevo.
Los trabajadores afectados por ERTE o autónomos que veían una reducción grave de sus ingresos han tenido acceso a una serie de ayudas facilitadas por el Gobierno para no tener tantas dificultades durante el estado de alarma. No obstante, una vez que se levante dicho estado de alarma, van a tener que recuperar las horas de trabajo perdidas a causa de la cuarentena hasta que finalice el año.
Por el momento, los trabajadores que van a retomar sus empleos van a ser principalmente pertenecientes al sector de la industria y la construcción, ya que dichos sectores fueron los primeros en verse afectados con el cierre de los negocios y servicios que no fueran de primera necesidad.
Relacionado con el sector de la industria, cuando se decretó el estado de alarma se procedió al cierre de todos los negocios que no tuvieran que ver con la creación y distribución de alimentos, así como también las que se dedicasen a la realización y venta de productos de higiene para combatir el virus, tales como geles desinfectantes, mascarillas, guantes, etc. Cabe destacar que tampoco se paralizaron otros negocios industriales como los de fabricación de bebidas alcohólicas.
Por otro lado, si hablamos del sector de la construcción, este tiene prohibido por el momento continuar con aquellas construcciones en edificios donde habiten ciudadanos ajenos a la obra, para prevenir contagios entre ellos y los trabajadores. Sin embargo, esta medida no afectará en aquellos casos en los que se tenga que arreglar de inmediato una avería en algún edificio o la realización de algún tipo de instalación que resulte verdaderamente urgente en estos momentos de confinamiento.
Trabajo que no pueden realizarse de manera telemática
Ajenos a estos dos sectores, también volverán a reabrir sus puertas aquellos negocios en los que no fuera posible realizar un trabajo telemático, como por ejemplo en el caso del sector de la limpieza, que tan importante es en estos momentos. Ante todo, el Gobierno recalca que el teletrabajo es sin duda la mejor opción para no poner en riesgo a los trabajadores.
Los negocios relacionados con el ocio permanecerán cerrados, y de hecho, no se espera su apertura en unos cuantos meses. De esta manera, restaurantes, salas de cine, polideportivos o parques de atracciones continuarán cerrados, algo que como podemos comprobar, está suponiendo un batacazo para el sector del turismo en nuestro país, que es uno de los pilares fundamentales en nuestra economía. De igual manera, se han prohibido la realización de fiestas patronales, verbenas, desfiles… Nada de eso es viable teniendo en cuenta el virus al que nos enfrentamos.
Todos aquellos comercios minoristas que no se dediquen a la comercialización de alimentos y bebidas, o sean considerados de primera necesidad, como veterinarias, estancos, farmacias, o lavanderías, permanecerán cerrados también. Existen excepciones como en el caso de los servicios de peluquería, que se admiten siempre y cuando se realicen a domicilio y no en el establecimiento habitual.
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